Entrevista con Melanie Nallicheri, CEO de EQRx, sobre su misión de revolucionar la medicina.

En junio de 2021 Abdul Latif Jameel Health y EQRx, una empresa comprometida con el desarrollo y la entrega de medicamentos innovadores a precios más bajos, firmaron una colaboración estratégica para la distribución de dos nuevos fármacos asequibles para el cáncer de pulmón, una vez que todas las autoridades pertinentes los hayan aprobado, a un potencial de 1500 millones de personas en todo Oriente Medio, África y Turquía.

Los dos programas oncológicos, aumolertinib, un inhibidor del receptor del factor de crecimiento epidérmico (EGFR), y sugemalimab, un anticuerpo anti-PD-L1, han mostrado datos prometedores en fase III para el tratamiento de pacientes con cáncer de pulmón no microcítico (CPNM) avanzado. Ambos tienen el potencial de ofrecer un tratamiento a una fracción del coste de los enfoques existentes.

Con esta colaboración, Abdul Latif Jameel Health comercializará los fármacos en mercados seleccionados de toda la región de Oriente Medio, así como en Turquía y toda África, proporcionando acceso a tratamientos asequibles, seguros y efectivos para miles de pacientes con cáncer de pulmón.

Hablamos con Melanie Nallicheri, CEO de EQRx, y Akram Bouchenaki, CEO de Abdul Latif Jameel Health, sobre la asociación y lo que podría significar para los pacientes con cáncer en los mercados objetivo.

Melanie, ¿puede hablarnos sobre la misión de EQRx?

Mellanie Nalicheri, CEO, EQRx
Melanie Nallicheri
CEO de EQRx

MN: Nuestra misión es mejorar la salud de todos a través de medicamentos excelentes, innovadores y asequibles,

  • que personas de todo el mundo puedan acceder a estos medicamentos para tratar enfermedades o afecciones crónicas o potencialmente mortales,
  • que los médicos de todo el mundo puedan ofrecérselas a sus pacientes sin dificultades administrativas innecesarias y
  • que tanto los pagadores como los sistemas sanitarios de todo el mundo puedan poner estos medicamentos a disposición de los pacientes de una manera económicamente sostenible.

Básicamente, queremos que los medicamentos innovadores que mejoran nuestras vidas estén disponibles y sean accesibles para los pacientes de todo el mundo.

¿Por qué hay tantos problemas de accesibilidad y asequibilidad en la industria farmacéutica?

MN: En los últimos años, nuestra comprensión de la medicina, la biología y la ciencia de los datos se ha desarrollado enormemente. Las cosas que podemos hacer hoy en día se habrían visto como ciencia ficción hace una o dos décadas. Normalmente, a medida que la tecnología avanza, los costes, o al menos los precios al consumidor, se reducen. Sin embargo, en la atención sanitaria, los costes han subido. Esto significa que hemos aumentado nuestra comprensión y nuestras capacidades, pero que la accesibilidad y asequibilidad de estas nuevas soluciones ha disminuido. Nos dimos cuenta de que esta dinámica no era la correcta y vimos una oportunidad de cambiarla creando un exitoso negocio a escala.

Dr. Akram Bouchenaki, CEO, Abdul Latif Jameel Health
Dr. Akram Bouchenaki
CEO de Abdul Latif Jameel Health

AB: Además de lo que ha dicho Melanie, existe una increíble necesidad médica insatisfecha de estos fármacos. En la región del CCG, que generalmente tiene un buen nivel de atención sanitaria, vemos que el cáncer de pulmón es el segundo más frecuente entre los hombres y el más mortal. Hasta el 80 por ciento de los casos se diagnostican en estadios avanzados y la tasa de supervivencia a los cinco años está entre el 10 y el 20 por ciento.

Por eso es tan fundamental ampliar en gran medida el acceso a estas terapias. Esa es la visión que estamos intentando hacer realidad.

Este no es un problema nuevo, ¿qué tiene de diferente el enfoque de EQRx?

MN: Reconocemos que, para marcar una diferencia real, se necesita una cartera, o catálogo, de medicamentos con un tamaño significativo. Esto nos permite ofrecer muchas opciones para tratar enfermedades crónicas o potencialmente mortales y lograr el mayor impacto. En lugar de empezar con uno o dos fármacos, quisimos empezar con 10, 20 o 30, centrándonos en áreas críticas, como la oncología y las enfermedades inmunitarias-inflamatorias.

También estamos abordando el problema desde una perspectiva diferente, basándonos en un objetivo compartido con los médicos y los pagadores. Normalmente, un fabricante lanza un estupendo fármaco nuevo, pero mantiene un precio elevado para maximizar sus beneficios y mantener felices a sus accionistas. Los médicos quieren ofrecer este fármaco a sus pacientes, mientras que los pagadores, como las aseguradoras o los sistemas sanitarios nacionales, quieren ponerlo a disposición de sus miembros y comunidades. El problema es que el coste es tan alto que solo pueden permitirse recetárselo a un determinado número de personas, de lo contrario, su presupuesto se arruinaría. Esto significa que tienen que restringir quién puede beneficiarse de estos fármacos. Es decir, los objetivos de los fabricantes, los médicos/pagadores y los pacientes están en conflicto entre sí.

Nuestro enfoque es trabajar hacia un objetivo común para hacer que estos medicamentos estén lo más disponibles posible. Para ello, pretendemos conseguir que nuestros precios sean transparentes, sencillos y radicalmente más bajos. Nosotros nos beneficiaremos de vender más de nuestros medicamentos, los médicos y los pagadores se beneficiarán al ofrecerles estos tratamientos a más personas sin salirse de sus presupuestos y, por su parte, los pacientes se beneficiarán de tener acceso a una atención sanitaria que mejora sus vidas.

¿Qué gran diferencia podría suponer esto para los sistemas sanitarios y para los pacientes?

MN: Los beneficios potenciales son enormes. Nuestra misión es ofrecer medicamentos que cambian la vida a precios radicalmente menores, entre un 25 y un 50 por ciento más bajos. Eso marcaría una diferencia significativa. Por ejemplo, digamos que el gasto global total para un fármaco específico es de 10 000 millones de USD, algo habitual en muchas enfermedades inmunitarias. Nuestro fármaco podría tener un precio de un tercio del precio del fármaco actual, por lo que en un mercado de 10 000 millones de USD supondría inmediatamente un ahorro potencial de más de 6600 millones de USD. Por supuesto, nunca vamos a poseer el 100 % de un mercado, pero incluso si solo tuviéramos una cuota de mercado del 15 %, equivalente a 1500 millones de USD, al ofrecer nuestro fármaco a un tercio del precio nosotros ingresaríamos 500 millones de USD y el sistema sanitario ahorraría 1000 millones de USD. De esta forma, podemos operar un gran negocio y, al mismo tiempo, generar un valor significativo para todas las demás partes interesadas de nuestro ecosistema, sobre todo para los pacientes, que tendrán acceso a tratamientos que antes no estaban a su disposición.

¿Cómo ha podido superar EQRx las barreras que han impedido que alguien hiciera esto antes?

MN: Nuestro modelo de negocio se basa en tres pilares fundamentales que creemos que nos permitirán lograr nuestro objetivo. El primero es que, desde el primer día, nos hemos centrado en crear una estructura de costes completamente diferente. Somos un nuevo negocio, por lo que hemos podido crear esa estructura desde cero en toda la organización.

En segundo lugar, estamos creando procesos operativos que aprovechan todo lo que tenemos a nuestra disposición como industria para reducir el coste del desarrollo de las medicinas. Por ejemplo, al utilizar enfoques remotos para monitorizar a los pacientes durante un ensayo clínico se pueden realizar ensayos mucho más rápido y de forma más eficiente, lo que reduce los costes.

Por último, debido a este modelo de negocio único, podemos prescindir del enfoque típico de venta de fármacos, impulsado por personal de ventas y con un alto nivel de promoción. Nuestros socios deberían crear el acceso a nuestros medicamentos, en lugar de enviar a cientos de vendedores para que persuadan a la gente para que los compren. Este tipo de modelo impulsado por el mercado no existía antes en el sector sanitario global.

En la imagen (de izq. a dcha.) Alexis Borisy, presidente ejecutivo del Consejo de administración, y Melanie Nallicheri, CEO de EQRx
Crédito de la foto © Fierce Biotech.

Akram, ¿qué fue lo que le convenció de que EQRx sería un buen socio para Abdul Latif Jameel Health?

AB: Nos interesamos por invertir en EQRx porque estamos muy de acuerdo con su visión, sus valores y su propósito general. El objetivo de Abdul Latif Jameel Health es ser un puente para acelerar el acceso a terapias innovadoras en el sur global. Las dos palabras clave son “acelerar” y “acceso”. Queremos que los medicamentos vitales lleguen más rápido y sean accesibles para más personas. La asequibilidad es una parte clave, pero el precio no es el único factor que impide que los medicamentos lleguen a quienes los necesitan.

En mi carrera profesional he estado en situaciones en las que hemos donado toneladas de fármacos para tratar enfermedades infecciosas a países donde las tasas de prevalencia eran muy altas, pero desafortunadamente los fármacos nunca llegaron a los pacientes que los necesitaban. Por lo tanto, no se trata solo de un problema de asequibilidad.

Otra cosa que realmente nos gustó del enfoque de EQRx es el modelo de negocio innovador que están construyendo y la forma en que se centran en establecer relaciones con las partes interesadas correctas para el futuro. Es una visión y una estrategia que apoyamos mucho y que esperamos implementar en nuestra parte del mundo.

Melanie, sus dos primeros productos son fármacos contra el cáncer: aumolertinib y sugemalimab. ¿Por qué decidieron empezar por estos dos?

MN: Cuando empezamos, nos propusimos tener nuestro primer fármaco a disposición de los pacientes en cinco años. Al analizar el mercado en busca de medicamentos para incorporarlos a nuestra cartera tuvimos en mente este objetivo. Tanto aumolertinib como sugemalimab tratan el cáncer de pulmón no microcítico, así como otros tipos de cáncer. Aumolertinib es un tratamiento dirigido en oncología para pacientes con mutaciones impulsadas por el gen EFG, mientras que sugemalimab es una inmunoterapia. En el cáncer, esta es la mayor clase de fármaco que conocemos hoy en día.

Estábamos muy entusiasmados con ambos, puesto que demostraron tener una eficacia excelente y un perfil de tolerabilidad sólido.

Además, los dos podrían estar disponibles ya en 2023, mucho antes de nuestro objetivo original de cinco años. Esto nos permite comenzar a tener conversaciones con agencias reguladoras y socios de todo el mundo para iniciar el proceso de llevar estos fármacos a las personas que los necesitan. Es la situación ideal: un medicamento excepcional, con un gran perfil de tolerabilidad y disponible mucho antes de lo que habíamos previsto originalmente. Por eso estábamos tan entusiasmados con estos dos tratamientos.

Akram, ¿cómo planea aprovechar la presencia global de Abdul Latif Jameel para llevar estos fármacos a quienes los necesitan?

AB: Este es el tipo de desafío para el que se creó Abdul Latif Jameel Health. La visión de Mohammed Jameel nos convirtió en una parte fundamental de la cadena de innovación, que va más allá de lo que ocurre en el laboratorio. Por supuesto, allí está el punto de partida, pero la innovación también consiste en encontrar nuevas formas, más rápidas y eficaces, de administrar esos tratamientos a los pacientes. Nos vemos a nosotros mismos como los proveedores de esa promesa de innovación. Estos fármacos van a ser absolutamente fundamentales en la transformación de la atención al paciente, en la prolongación de la vida y en la mejora del tratamiento del cáncer. La promesa está ahí y consideramos que la entrega es como una parte esencial del recorrido de innovación.

¿Cuáles cree que son los mayores desafíos a los que se enfrenta EQRx para lograr sus ambiciones?

MN: Nuestro primer reto es desarrollar nuestro catálogo de medicamentos y construir nuestra organización a escala. Para ello, debemos ser capaz de hacer dos cosas. Uno, necesitamos atraer a algunos de los mejores talentos del sector. En segundo lugar, debemos ser capaces de movilizar un capital significativo para construir rápidamente una empresa a escala. Hemos trabajado diligentemente desde el principio. En cuanto a las personas, hemos establecido una marca de talento única, tanto por nuestra misión social, que es realmente emocionante para las personas, como por la cultura de EQRx, que recompensa la iniciativa y la innovación. Animamos y formamos a las personas para que intenten hacer las cosas de forma diferente, incluso aunque algunas ideas no funcionen.

AB: Para nosotros, el reto es implementar este modelo innovador y revolucionario. Tenemos que salir y cambiar las percepciones de las personas sobre cómo funciona el mercado de los fármacos. No queremos tener ejércitos de representantes de ventas paseándose por los pasillos de los hospitales, lo que supone una enorme pérdida de tiempo productivo, sino que nos centramos en el servicio, la educación y la distribución. La asociación con autoridades sanitarias, reguladores y proveedores de atención médica en general va a ser un factor clave para nuestro éxito, a medida que construimos un nuevo modelo de medicina en el que los pacientes toman las riendas de su propia salud.

Por último, ¿cuál es el siguiente paso para ambos?

MN: Nos centraremos en crear nuestro catálogo y nuestra organización. En este momento tenemos más de 10 programas en nuestra cartera. De estos, cinco son programas en estadio clínico, incluidos aumolertinib y sugemalimab. También tenemos otra opción de inmunoterapia en nuestra cartera, un fármaco para el cáncer de mama y otro para las principales enfermedades inmunoinflamatorias, como la artritis reumatoide y la dermatitis atópica. Aparte de esto, estamos desarrollando varios programas que aún están en fases anteriores y se dirigen tanto a enfermedades oncológicas como inmunoinflamatorias. Recientemente también hemos anunciado varias colaboraciones de ingeniería farmacológica con empresas. Para 2025 o 2026 esperamos abordar más del 20 % del gasto del mercado mundial de fármacos de marca, que asciende a un billón de dólares. Sin duda, se trata de un propósito muy emocionante.

AB: Estamos ansiosos por formar parte de ese viaje. Tenemos muchas ganas de trabajar con Melanie y el equipo de EQRx para poner en práctica nuestra estrategia. Ahí es cuando empieza realmente el trabajo. Estamos entusiasmados. Nos encantaría que los pacientes accedieran a estos nuevos y emocionantes fármacos tan pronto como sea posible, así que haremos todo lo que esté en nuestra mano para lograrlo en los próximos años y, con suerte, más allá.