Históricamente, los combustibles fósiles han sido la base sobre la que se han construido muchas economías de Oriente Medio. Por lo tanto, quizás sea irónico que varios de los países que suministran gran parte del petróleo y gas del mundo estén entre los más comprometidos a reducir nuestra dependencia de ellos.

En todos los países que conforman el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) existen políticas para eliminar gradualmente los combustibles fósiles y crear economías sostenibles con bajas emisiones de carbono. Promover y fomentar el uso de vehículos eléctricos y otras formas de “movilidad ecológica” a menudo es fundamental para estos planes.

Por ejemplo, los EAU tienen un Plan Nacional de Cambio Climático 2017–2050, que es una hoja de ruta destinada a reforzar las acciones para la mitigación del cambio climático a nivel nacional. Han lanzado una serie de iniciativas para mejorar su sostenibilidad y han establecido indicadores clave de rendimiento (KPI por sus siglas en inglés) para medir sus objetivos prioritarios.[1] Del mismo modo, en Arabia Saudí, la Estrategia Nacional de Transporte y Logística, lanzada en 2021, incluye objetivos medioambientales, como: una mayor sostenibilidad, una reducción del consumo de combustible del 25 % y la provisión de soluciones inteligentes a los desafíos del transporte mediante la adopción de tecnologías de movilidad global innovadoras y de vanguardia.[2]

Sin embargo, su compromiso con la movilidad ecológica va más allá. Los planes para nuevas “ciudades inteligentes”, como Masdar City en Abu Dabi y NEOM en Arabia Saudí, cuentan con un diseño que eliminan la necesidad de coches y motores de combustión interna.

NEOM pretende ser una ciudad “sin coches ni carreteras tradicionales”.[3] Su ambición es crear el primer sistema de movilidad sostenible y perfectamente conectado del mundo impulsado en un 100 % por energía renovable, utilizando vehículos de cero emisiones.

A diferencia de las ciudades asentadas, como Londres, Nueva York y París, los residentes de esta ciudad inteligente se desplazarán a través de redes integradas de transporte impulsado de forma sostenible, por carretera, ferrocarril y aire, en lugar del actual batiburrillo compuesto por algunos coches eléctricos (VE), vehículos híbridos y carriles bici. A nivel de barrios, los servicios clave estarán a poca distancia, adecuada para ir a pie o en bicicleta. El resto de necesidades de transporte de la ciudad se cubrirán con lanzaderas autónomas y eléctricas compartidas que estarán disponibles a petición, junto con un sistema de tránsito subterráneo de alta velocidad.

Recompensas ecológicas

Los objetivos de la movilidad ecológica son reducir la contaminación del aire y del ruido y abordar el cambio climático en el sector a través de la mitigación y la adaptación. Según un informe del Banco Mundial, el transporte contribuye actualmente al 23 % de las emisiones globales de gases de efecto invernadero (GEI) relacionadas con la energía y al 18 % de todas las emisiones producidas por el hombre en la economía global.[4] En una proyección del informe, se espera que las emisiones de dióxido de carbono relacionadas con la energía (CO2) crezcan un 40 % entre 2013 y 2040.[5] La contaminación del aire, tanto ambiental (exterior) como doméstica (interior), es el mayor riesgo ambiental para la salud: la contaminación del aire ambiental mata a aproximadamente tres millones de personas cada año. Además, las pruebas de varios países sugieren que el ruido del tráfico tiene el segundo mayor impacto medioambiental en la salud.

La movilidad ecológica también es esencial para cumplir los objetivos del Acuerdo de París de la ONU de reducir a la mitad las emisiones de carbono globales para 2030 y alcanzar las cero emisiones netas de carbono para 2050.

Para cumplir con cualquier objetivo de reducción de emisiones, el requisito mínimo es que el crecimiento económico se desvincule del incremento de emisiones. Esto significa que las emisiones se reducirían de un año a otro, a un ritmo constante, incluso si la economía crece, un proceso llamado desacoplamiento absoluto. En segundo lugar, la tasa de crecimiento de la economía superaría la tasa de crecimiento de las emisiones, un proceso llamado desacoplamiento relativo.

Las recompensas de una política de transporte ecológica no son simplemente medioambientales. La carga que supone la propiedad de un coche en un país es inmensa, desde los costes de construcción de carreteras y la infraestructura asociada, hasta proporcionar la atención hospitalaria adecuada para lidiar con los inevitables accidentes de tráfico. Un informe de Strategy & Co, parte de la red de PwC, calculó que los países del CCG podrían acumular 400 000 millones de USD en valor económico durante los próximos 20 años si priorizaran el transporte público, junto con coches y camiones eléctricos e híbridos, programas de uso compartido de vehículos y soluciones de micromovilidad, como bicicletas y scooters, en lugar de coches.[6]

Esos 400 000 millones de USD provienen de varias fuentes. El informe argumenta que la reducción del gasto en carreteras y otras infraestructuras, combinada con políticas para desalentar la propiedad de coches y la inversión en proyectos de transporte público, podría ahorrar hasta 145 000 millones de USD e impulsar el uso del transporte público del 2,2 % al 13,6 % para 2040. La reducción de la dependencia de los coches personales también se traduciría en menos accidentes, una caída del 13 % para 2040 que ahorraría 115 000 millones de USD en todos los costes asociados con los accidentes de tráfico. Los tiempos de los desplazamientos al trabajo se reducirían a medida que desaparecieran los atascos de tráfico, lo que aumentaría la productividad en hasta 75 000 millones de USD a lo largo de los próximos 20 años.

Para los países de la región MENA hay fuertes incentivos para la movilidad ecológica, así como un compromiso con el transporte sostenible en sus ciudades más recientes. Sin embargo, también hay barreras sustanciales, además del importante el círculo vicioso que ha atrapado a muchas ciudades no solo en esta región, sino en todo el mundo. Las ciudades están diseñadas en torno a los coches porque todos tienen un coche, lo que significa que la gente necesita usarlos para moverse por la ciudad

En las ciudades del GCC, el transporte privado representa el 91 % de todos los viajes, en contraposición al 30 % en ciudades comparables de otros lugares del mundo. Esto se debe, en parte, a que el coste de tener y conducir un coche es mucho menor que el de la mayoría de los países, gracias en gran medida a la gasolina subvencionada.

Las ciudades se extienden, reforzando la dependencia del transporte privado, en parte porque todo el mundo tiene un coche. No hay cargos por congestión para desalentar el uso de vehículos de motor diésel y gasolina, ni hay un desarrollo a gran escala de infraestructuras de carga de vehículos eléctricos. Aunque ciudades como Dubái ofrecen incentivos en forma de aparcamiento gratuito y una pequeña red de puntos de carga de vehículos eléctricos, esto ha demostrado no ser suficiente para desencadenar un cambio significativo en el comportamiento general respecto a la movilidad.

Aumento de la inversión

A nivel mundial, hay una creciente inversión en los tipos de sistemas de transporte público necesarios para proporcionar una alternativa práctica al automóvil, y gran parte ha tenido lugar en Oriente Medio. Por ejemplo, Catar ha construido uno de los sistemas de metro más avanzados jamás construidos, el metro de Doha, en parte en preparación para la Copa del Mundo de fútbol. Operativos desde 2019, sus trenes sin conductor son rápidos, ya que alcanzan los 100 km/h, y recorren una red de 67 km con 37 estaciones. El proyecto se encuentra entre una serie de medidas para reducir la congestión de tráfico de la ciudad en un 50 %, ahorrar alrededor de 1000 millones de USD en 20 años y disminuir las emisiones de carbono en un 30 %.[7]

Riyadh Metro under construction
Una de las estaciones de metro de Riad, en construcción. Crédito de la foto © Riyadh Development Authority

En Arabia Saudí, el metro de Riad, un proyecto de 22 500 millones de USD, abrirá sus puertas en 2023. Incluye 85 estaciones[8], con una capacidad diaria de 1,16 millones de pasajeros al inicio de la operación, que se estima que aumentará hasta 3,6 millones de pasajeros al cabo de diez años. Se espera que el proyecto contribuya a reducir el número de viajes en coche en aproximadamente 250 000 trayectos al día, que ahorre el equivalente a 400 000 litros de combustible al día y que aumente el porcentaje de uso del transporte público del 5 % actual al 20 % en un plazo de 10 años. El sistema de metro, que forma parte del proyecto King Abdulaziz para el transporte público de Riad, se complementará con una red integral de autobuses que consta de 2860 paradas y 80 rutas, a las que prestan servicio 842 autobuses.[9]

En otros lugares de la región, los sistemas de tránsito masivo establecidos siguen creciendo. En Dubái, la extensión de metro de 15 km y seis estaciones a la Expo 2020, con un coste estimado de 2900 millones de USD, se consideró un factor importante en el éxito de esta feria mundial, puesto que transportó a cientos de miles de visitantes allí de forma rápida y eficiente. Ahora, la Autoridad de Carreteras y Transporte (RTA) del Emirato está considerando ampliar la red de metro con más de 19 kilómetros de nuevas vías y una docena de estaciones adicionales en construcción.[10]

El metro del Cairo, el primero de su tipo en África, lleva funcionando y expandiéndose desde 1987. Ahora tiene 90 kilómetros de vía, 74 estaciones[11] y transporta casi cuatro millones de pasajeros por día.[12] Está gestionado por la Autoridad Nacional de Túneles (NAT), que ha concedido contratos por valor de 650 millones de EUR para construir una cuarta línea.[13] Esta sección de 19 km incluirá 16 estaciones y conectará la estación Hadayek El Ashgar, en la Ciudad del 6 de octubre, con la estación Malek El Saleh, en Nuevo Cairo, dando servicio al nuevo Gran Museo Egipcio y a las pirámides de Giza. 

Históricamente, uno de los mayores desafíos a los que se enfrentan los países de la región MENA al desarrollar opciones de transporte público sostenibles es el relativo subdesarrollo de sistemas de transporte público de cualquier tipo, y los comportamientos y percepciones arraigados que se derivan de ello. ¿Por qué utilizar un autobús lleno de gente cuando es tan barato conducir un coche privado? De los 180 países incluidos en el Índice de rendimiento medioambiental 2022[14], los EAU se encuentran en el puesto 39 (frente al 42 de 2020), Arabia Saudí se encuentra en el puesto 109 y Catar en el puesto 137, lo que sitúa su rendimiento medioambiental muy por debajo de los de algunos de sus homólogos europeos.[15] Afortunadamente, eso está cambiando gradualmente. Las flotas de autobuses están creciendo y muchas de ellas son eléctricas, o incluso alimentadas por hidrógeno.

Movilidad ecológica en MENA a plena velocidad

Masdar eco-bus
Masdar presentó el Eco-Bus totalmente eléctrico en la Semana de sostenibilidad en Abu Dabi. Crédito de la foto © Masdar

En los EAU se están probando autobuses eléctricos en Abu Dabi, Dubái y Sharjah.

Abu Dabi está probando un ecobus[16] desarrollado conjuntamente por Masdar, Hafilat y Siemens. Por su parte, en Dubái la RTA se está preparando para utilizar un sistema de carga inalámbrica que permite que los autobuses y otros vehículos se carguen mientras están en movimiento a través de una red de carga eléctrica integrada en una cinta de 60 metros debajo de la carretera.[17]

Ha firmado acuerdos tanto con Volvo como con BusTech Group, de Australia, para probar el funcionamiento de autobuses eléctricos de cero emisiones.[18]

Catar ya opera una de las flotas de autobuses eléctricos más grandes del mundo. Ahora cuenta con 741 autobuses electrónicos Yutong utilizados para llevar a los aficionados al fútbol a la Copa Mundial de la FIFA 2022. Los autobuses forman parte de un pedido total de 1002 autobuses eléctricos operados por Mowasalat, el organismo de transporte público del país. Mientras tanto, en Egipto, se ha comprado una flota de 110 autobuses eléctricos para el transporte público en El Cairo y Alejandría.

Este movimiento hacia soluciones de transporte sostenibles con energía eléctrica no se limita a autobuses y automóviles; los aviones electrónicos también podrían estar pronto surcando los cielos de Oriente Medio. La aviación representa aproximadamente el 2,5 % de las emisiones globales de CO2, por lo que la transición del sector de su dependencia de los combustibles fósiles a la energía eléctrica limpia se considera una prioridad.[19] Falcon Aviation Services, con sede en Abu Dabi, adquirirá 35 aviones eléctricos de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL) Eve para lanzar vuelos turísticos en Dubái en 2026.[20] Los planes de Arabia Saudí son aún mayores.[21] Su aerolínea nacional, Saudia, ha firmado un memorando de entendimiento con Lilium, una empresa alemana que cotiza en NASDAQ, que podría proporcionarle hasta 100 aviones eléctricos de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL). Se dice que la aerolínea está considerando crear una red de servicios de clase ejecutiva en todo el país, con vuelos punto a punto y servicios que se dirigen a los principales centros de conexiones de Saudia Airlines.

A través de Jameel Investment Management Company (JIMCO), Abdul Latif Jameel también participa en el paso a la e-aviación.[22] Ha invertido en la empresa emergente californiana Joby Aviation, que está desarrollando un taxi eVTOL. Este vehículo aeronáutico de cinco asientos con piloto puede volar a 200 mph, cubrir 241 kilómetros con una sola carga y está previsto que sus servicios se comercialicen para 2024.

Crédito de la foto © JOBY Aviation

“El servicio de taxi aéreo aún se encuentra en las primeras fases de comercialización, pero tiene el potencial de transformar por completo el futuro de la movilidad. La mejora del transporte diario en línea con la sostenibilidad ambiental es una misión que compartimos con todos nuestros socios empresariales”, comentó Hassan Jameel, presidente adjunto y vicepresidente de Abdul Latif Jameel.

Alejándose aún más del transporte convencional, Dubái parece estar más cerca de lanzar el primer hiperbucle del mundo que conectaría Abu Dabi y Dubái.[23] Se espera que este proyecto multimillonario reduzca el tiempo de viaje entre Dubái y Abu Dabi de más de 60 minutos a solo 12, aunque no se ha confirmado aún la fecha de finalización.

La carga y los pasajeros, sentados en compartimientos, se transportarán en una cápsula suspendida casi en vacío a velocidades de hasta 760 mph. Se requiere una energía mínima gracias a un sistema patentado de motor eléctrico lineal, electromagnetismo sin contacto y resistencia aerodinámica ultrabaja. El único sonido asociado con el hiperbucle es, aparentemente, un “zumbido”. El concepto fue concebido originalmente por el empresario tecnológico Elon Musk y luego adoptado por Virgin Hyperloop One.

Crédito fotográfico © Hyperloop One

DP World, el especialista en logística con sede en Dubái, también ha invertido para formar una agrupación empresarial, DP World Cargospeed, que “transportará bienes de alta prioridad y urgentes, incluidos alimentos frescos, suministros médicos, electrónica y más”.[24] El director ejecutivo de DP World, el sultán Ahmed Bin Sulayem, tiene grandes ambiciones para esta tecnología: “Esperamos que un proyecto de hiperbucle en el Golfo logre que todas las ciudades estén a menos de una hora de distancia entre sí, con el potencial de trasladar a 45 millones de pasajeros al año”, predijo[25] en 2020, y añadió que la empresa estaba trabajando con la Economic City Authority de Arabia Saudí para explorar un centro de investigación y desarrollo de hiperbucles y unas instalaciones de fabricación, que se espera que creen más de 124 000 empleos locales de alta tecnología y generen aproximadamente 4000 millones de USD de crecimiento del PIB para 2030.

Mientras tanto, la movilidad compartida y la micromovilidad están demostrando ser populares. La movilidad compartida es, por ejemplo, servicios de taxi a tiempo completo o a tiempo parcial como Careem, servicios de autobús y transporte a pedido como Swvl, así como opciones de alquiler de coches autónomos, como ekar y Udrive en Dubái[26]. Careem, famoso por ser el primer “unicornio” (una empresa emergente que crece hasta alcanzar un valor de mil millones de USD o más), es en gran medida el líder del sector. Esta empresa, que Uber compró por 3000 millones de USD en 2020, tiene su sede en Dubái y opera en 14 países, incluidos Arabia Saudí, Catar y Egipto, más de 90 ciudades y cuenta con 33 millones de usuarios registrados. Sus “capitanes”, como prefieren llamar a sus conductores, completaron un total de 109 millones de viajes en todos sus mercados[27] e incluyeron una asociación con Abdul Latif Jameel Motors y Bab Rizq Jameel en 2016 para crear empleo.

La decisión de Careem de ofrecer patinetes eléctricos y bicicletas acopladas en Dubái confirma que el mercado de la micromovilidad, cualquier cosa sobre dos ruedas que solo lleve a una persona, tiene potencial. En Dubái, operadores como Tier, Skrrt, Arnab y Lime también ofrecen patinetes eléctricos basados en aplicaciones.

La movilidad ecológica está en camino en la región MENA, más obviamente en aquellos países que se benefician de la riqueza del petróleo y poblaciones relativamente pequeñas. Los escépticos podrían decir que se trata de una mejora todavía reducida, pero también es evidente que los países de la región no están simplemente abordando el problema de las emisiones de gases de efecto invernadero y carbono de boquilla. Sus acciones son serias, financieramente significativas y, en algunos casos, impresionantemente innovadoras.

 

[1] https://reglobal.co/green-mobility-achieving-carbon-neutrality-through-transport-in-the-middle-east-by-2030/

[2] https://www.arabnews.com/node/1885636/saudi-arabia

[3] https://www.neom.com/en-us/ourbusiness/sectors/mobility

[4] https://openknowledge.worldbank.org/handle/10986/30493

[5] https://openknowledge.worldbank.org/handle/10986/30493

[6] https://www.strategyand.pwc.com/m1/en/insights/2021/sustainable-mobility/sustainable-mobility.pdf

[7] Doha metro rings fans together’, The Observer, 4 de diciembre de 2022.

[8]https://www.rcrc.gov.sa/en/projects/king-abdulaziz-project-for-riyadh-public-transport

[9] https://www.rcrc.gov.sa/en/projects/king-abdulaziz-project-for-riyadh-public-transport

[10]https://www.railjournal.com/infrastructure/dubai-tenders-metro-extension-contracts/

[11] http://mic-ro.com/metro/metrocity.html?city=Cairo

[12] https://www.railway-technology.com/projects/cairo-metro/

[13] https://www.colas.com/en/media/press-releases/phase-1-cairo-metro-line-4-colas-led-consortium-wins-system-package

[14] https://epi.yale.edu/epi-results/2022/component/epi

[15] https://reglobal.co/green-mobility-achieving-carbon-neutrality-through-transport-in-the-middle-east-by-2030/

[16] https://reglobal.co/green-mobility-achieving-carbon-neutrality-through-transport-in-the-middle-east-by-2030/

[17] https://mediaoffice.ae/news/2020/Feb/12-02/RTA-starts-trial-run-of-dynamic-charging-of-electric-vehicles

[18] https://www.rta.ae/wps/portal/rta/ae/home/news-and-media/all-news/NewsDetails/rta-signs-agreement-with-australian-bustech-group-to-trial-eco-friendly-electric-bus?lang=en

[19] https://www.iea.org/reports/aviation

[20] https://www.falconaviation.ae/2022/06/07/eve-and-falcon-aviation-services-announce-partnership-to-introduce-evtol-flights-in-dubai/

[21] https://lilium.com/newsroom-detail/lilium-partners-saudia

[22] https://alj.com/en/news/abdul-latif-jameel-invests-in-joby-aviation/

[23] https://gulfnews.com/business/markets/with-dubai-owned-dp-worlds-push-hyperloop-to-soon-enable-dubai-abu-dhabi-cargo-transport-in-minutes-1.1635651215642

[24] https://www.dpworld.com/smart-trade/cargospeed

[25] https://www.dpworld.com/news/blogs/virgin-hyperloop-is-our-moonshot-moment-for-global-transportation-and-trade

[26] https://www.strategyand.pwc.com/m1/en/insights/2021/sustainable-mobility/sustainable-mobility.pdf

[27] https://www.zawya.com/en/press-release/careem-releases-its-customer-and-business-trends-of-2021-ri8ppwc6